O:Todo sirve para el morbo

El clásico Chivas vs. América, último previo a la Copa del Mundo, fue el caldo de cultivo ideal para los morbos generados desde los medios y bien recibidos por el público en general. Ahora ha dejado de ser Oswaldo vs. Ochoa la pulseada (debido a que una tajante lista del 'Vasco' Aguirre, dada a conocer pocos días antes, dejaba definitivamente sin esperanzas al portero de Santos) para pasar a convertirse en un Ochoa vs. Michel o América vs. Chivas.
Más allá del resultado propio del partido, en el que el América extrañó mucho más a Cabañas que Chivas al
'Chicharito', las miradas estaban centradas en el otro clásico, el que supuestamente enfrentaba al resistido por todos (menos por los americanistas, por supuesto) portero de los de Coapa, con su nuevo rival en la lucha por la titularidad en el 'Tri', Luis Michel, portero del archirrival Chivas.
Una cuenta sencilla determinó como vencedor a Michel, de gran actuación, ante un Ochoa al cual se le magnificaron las culpas en el gol del rival, que sirvió para dirimir el pleito, cuando en realidad la defensa de su equipo se quedó estática mientras Omar Arellano hacía una gran jugada con la complicidad de los hombres de retaguardia amarillos. Hasta se le adjudicó a Ochoa que había dado vuelta la cara, cuando en los videos es obvio que no lo hizo y optó a último momento por inclinarse levemente a su derecha, intuyendo que Arellano haría el centro de la muerte.
Más allá de héroes y villanos, porque de eso se trata, esta campaña mina la confianza del hasta el momento portero titular de México en Sudáfrica, más cuando su propio padre se suma al circo declarando: "Creo que si se le llega a presentar otra vez, entonces ya sería una cuestión de que sí hay un problema, y sería cuestión de tratarlo, pero creo que es falta de atención, en el sentido de estar al ciento por ciento...".
Mientras tanto Ochoa ha sido la cara de empresas importantes, que se han valido de su popularidad para hacer costosas publicidades (All State y Hombe Depot, entre otras), a las que no les caería nada bien que su estrella quedara en la banca en el máximo momento.

Aguirre ya defenestró a Orozco, Corona y Sánchez, mientras le dio un sorpresivo llamado al 'Conejo' Pérez, que lo deja ahora de cara a un gran problema si el portero americanista no puede con este momento agravado por una presión mediática muy alta.