¿Capello ocultó lo mejor de su equipo o
Aguirre mostró demasiado? ¿Es Inglaterra tan serio candidato en el Mundial con
lo que mostró ante México y -en contraposición- el equipo azteca es mucho más de
lo que parecía?.
Estas preguntas, cuando hay que recordar
que el vencedor del amistoso fue Inglaterra (3-1), parecen ir a contramano de la
lógica. Pero el fútbol una vez más no la tuvo y le dio una victoria holgada, en
los guarismos, a un equipo que no mostró gran cosa.
Los nombres prometían una diferencia que
no se vio en la cancha. Basta con circunscribirse a los nombres del fútbol inglés
solamente. De un lado Rooney del
Manchester United, Gerrard del Liverpool, Crouch ex Manchester y hoy del
Tottenham, etc.; del otro Vela, suplente en Arsenal, Franco, suplente del West
Ham United, Giovani Dos Santos, dejado de lado por el Tottenham.
Con todos esos apellidos de uno y otro
lado, hubo que agradecerle al muy buen portero inglés, Robert Green, y al poste
que México no se fuera al descanso con una ventaja que hubiera merecido. Además
dominó el medio campo con claridad, tocando y rotando como un equipo que sabía
lo que hacía. Solo le faltó puntada final a los de Aguirre para llevarse al
descanso una ventaja que fue desventaja porque la altura fue letal para la
defensa azteca. Los dos primeros goles le llegaron del cielo.
Una victoria inglesa que debería
preocupar a Fabio Capello, porque su equipo no mostró muchas ideas en ataque,
bailó en el medio y sufrió en defensa. Por más que Capello se haya 'curado en salud' antes del partido alertando 'experimentaré contra México' y sin incluir a los jugadores del Chelsea. No importa, los nombres seguían pesando demasiado y lo mejor de los ingleses fue el cuidapalos Green.
¡Todo dicho!.
Una derrota que, lejos de frustrar, debe
entusiasmar a los mexicanos; sin que por eso pierdan de vista que les cuesta un
montón hacer los goles que merecen. Se juega bien, pero los partidos no se merecen sino que se ganan, y con goles.
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