El Campeón del Mundo, Italia, se despidió de Sudáfrica 2010 sin siquiera superar la fase de grupos, alcanzando un nivel de fracaso que solo se compara al de Francia. Ambos fueron los finalistas del pasado mundial, Alemania 2010, y nadie podía vaticinar que se irían tan temprano de éste.
Italia mantuvo las expectativas de todos porque no solo es el campeón defensor, sino que siempre se ha comportado en los mundiales de la misma forma, arrancando muy mal y superándose. Sin embargo esta vez arrancó mal y terminó peor, con una derrota ante el modestísimo equipo eslovaco que se puede adjetivar de humillante.
Con Italia y Francia, más la segura eliminación de Alemania o Inglaterra (se cruzan en octavos luego de la también triste fase de grupos que tuvieron los británicos) las vedettes de la FIFA abandonan demasiado temprano el escenario, mientras que los sudamericanos humildes siguen haciendo de las suyas, como sucedió con la arrasante clasificación de Paraguay al tope del mismo grupo en que los italianos terminaron últimos.
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