Dicen por ahí … (¡¡los que saben!!), que
a un Mundial hay que llevar a la mayor cantidad de polifuncionales posibles y
que los goleadores son fundamentales.
Otros opinan sobre lo conveniente o no de
las decisiones de Aguirre de haber llevado
al ‘Conejo’ Pérez o haber dejado a Oswaldo Sánchez, de que vaya un Torrado y se
quede un Pardo, etc.
Preocupan los desempeños de Cuauhtémoc y
el ‘Bofo’, no porque no sepan sino porque el ritmo se les puede hacer demasiado
intenso. Pero todos parecen coincidir en que si no son ellos, ¿entonces quién? Aparentemente
no hay mucho de donde escoger. Una coincidencia en el Grupo A, ya que tanto en
Francia, como Uruguay y México parece haber carencia de ‘10s’. Fuga de cerebros
o, mejor dicho, ausencia; porque si se hubieran ‘fugado’ para Europa estarían a
disposición y con más experiencia.
¡En fin! Si no hay, no hay. Pero de lo
que hay tampoco se aprovecha. Mientras tanto y tanto se habla de Nery, el ‘Bofo’,
Sabah y su lesión ‘¡erróneamente diagnosticada!” (¿alguien lo cree?), Vuoso, etc., etc.,
nadie parece acordarse de que se queda en México un polifuncional del ataque,
que aparece por izquierda o derecha, le pega con ambas piernas, tiene desborde,
panorama de cancha, pisa el área con mucho criterio, tiene gambeta con mucha
cintura, es goleador y mexicano de nacimiento (para los ultranacionalistas).
Nadie en México parece darse cuenta de
que el gran ausente de esta Selección es Omar Arellano.
La historia a corto plazo se encargará de
demostrar que su no convocatoria es un grosero error del ‘Vasco’ Aguirre. Tal
vez peor que haber dejado a Oswaldo
afuera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario